no lo sé, quizá a la larga lo será… no tengo fe que haga un buen trabajo porque el diagnóstico de la derecha de los problemas sociales es erróneo y sus intenciones no apuntan a mejorar las condiciones que la gente necesita…
Pero la izquierda necesita reconfigurarse también… este giro a la derecha es una tendencia internacional, el continente se esta moviendo y el resto del mundo también. Estos so los años previos a algo grande.
No espero mucho que la izquierda actual haga mucha reconfiguración. El tema es que hace falta una izquierda de verdad. Las izquierdas “grandes” que hemos visto han sido menos izquierda y más “centrismo con ventaja”, y vamos a ver cómo ahora que hay un gobierno de derecha van a salir a reconocer que sí, ellos no son realmente de izquierda, y que trabajar 60 horas semanales le hace bien al país.
No. Este país no quiere salvarse. La gente tiene el cerebro digerido por el yutú y el tiktok. Al final, como decía un profe mío, “no pasan cosas malas, es la gente la mala”.
¿Cómo va la cosa? ¿Nos salvamos ya?
quién sabe?, en una de esas es para mejor
¿Me estás weando? En serio. Cómo puede “el 60% de la gente escogió fascismo” ser para mejor.
no lo sé, quizá a la larga lo será… no tengo fe que haga un buen trabajo porque el diagnóstico de la derecha de los problemas sociales es erróneo y sus intenciones no apuntan a mejorar las condiciones que la gente necesita…
Pero la izquierda necesita reconfigurarse también… este giro a la derecha es una tendencia internacional, el continente se esta moviendo y el resto del mundo también. Estos so los años previos a algo grande.
No espero mucho que la izquierda actual haga mucha reconfiguración. El tema es que hace falta una izquierda de verdad. Las izquierdas “grandes” que hemos visto han sido menos izquierda y más “centrismo con ventaja”, y vamos a ver cómo ahora que hay un gobierno de derecha van a salir a reconocer que sí, ellos no son realmente de izquierda, y que trabajar 60 horas semanales le hace bien al país.
No. Este país no quiere salvarse. La gente tiene el cerebro digerido por el yutú y el tiktok. Al final, como decía un profe mío, “no pasan cosas malas, es la gente la mala”.
Así veo parece que se viene fea la cosa.